jueves, 29 de febrero de 2024

Programados

 Estamos programados para sentirnos culpables, para ver lo negativo antes que lo positivo, para ser depresivos antes que optimistas, vemos los finales como fracasos, no como obstáculos a superar o transiciones que atravesar, a depender en vez de desprender, a enfocarnos en lo que nos falta y no a concentrarnos y enriquecer lo que tenemos, todo eso ha engendrado generaciones y generaciones de seres inconformes, molestos e incapaces de actuar para cambiar.  

Hemos conquistado la inutilidad y dejado a un lado el verbo más importante: Hacer 

Le hemos dado a la palabra fracaso todo el poder y no nos percatamos que sólo es cuestión de prueba y fallo.

Hemos idealizado la luz y no aceptamos que lo único que existe, es la oscuridad, que la primera es la ausencia de la segunda, lo que prueba una vez más que alabamos lo que no existe. 

Nos atrapa y nos consume el futuro, porque no sabemos, queremos construirlo a base de premisas futuras y nos olvidamos de sentar bien nuestro presente. No acabamos de comprender que lo único que tenemos es el presente y que esa es nuestra arma más letal, la cual siempre está apuntando a nosotros...

Vivimos esperando la oportunidad, en vez de crearla, vivimos recordando el pasado en vez de aprender de el y dejarlo ir, vivimos obsesionados con el futuro, en vez de tomarlo como lo que es, una posibilidad...