martes, 25 de septiembre de 2012

Amigos con derechos 1ra parte

Recuerdo que amigos con derechos hace unos años era "andar" sin andar con alguien, es decir, amigos con derecho a abrazos, besos y un poco más, pero sin derecho a reclamos. Ideal para algunos personajes con el síndrome de Casanova.

Qué mejor que tener sexo sin el fastidioso compromiso emocional que conlleva construir una relación. Ese es el punto central de los amigos con beneficios. El no compromiso emocional hacia la otra persona.


Sin querer ser sexista, machista, feminista o cualquier término que termine en "ista" los hombres toda la vida han tenido este tipo de amistades, lo que pasa es que antes eran mas solapados, hoy en día, es popular esto de los amigos con derecho porque hemos sido las mujeres las que nos hemos lanzado de lleno a conquistar ese aspecto de nuestra libertad. Estoy segura de que muchisimas mujeres quisieran tener su amiguito con derecho,  sin las molestias de un novio "guardaespaldas", pero la gran mayoría no se atreve porque TIENE MIEDO.

Miedo a ser señalada como fácil, como puta, como libertina, desordenada, y un sinnúmero de bajos calificativos morales. Y no es que sea la gran cosa tener un amigo con derecho, a veces en vez de relajar terminan estresándote, pero el solo hecho de PODER tenerlo sin que la sociedad te señale es un acto de rebeldía y si te señala y te vale es un acto de libertad.

Muchas veces el miedo no es solo por el señalamiento, sino que es mas profundo todavía, nos graban desde pequeñas el disco de que "tenemos" que ser niñas buenas, que no debemos rebelarnos nunca, que esperar al "indicado" es un noble propósito para la vida y un montón de información que terminamos creyendo que tener un "amigo" y que no sea "el indicado" es malo, muy malo, y que de tenerlo conllevaría la pérdida del derecho a ser elegida por ese príncipe azul que nos espera, pero lo que no nos dicen es que mientras a nosotras nos graban la idea de la monogamia, a los hombres les graban todo lo contrario, entre mas "amigas" tenga, mejor.

Los hombres no entienden de estas cosas y no los culpo, nunca han tenido que estar en el banquillo de los acusados, nunca han tenido que estar en varios papeles a la vez y tener que dar la talla en todos: mujer, esposa o novia, madre, hija, amiga, trabajadora, ama de casa, cocinera, siempre fiel, lista para casarse, en fin, ser todo lo que la sociedad espera que seas, sobre todo sin quejarte ni enfermarte.

A los hombres se les perdona todo por ser hombres y a las mujeres no se nos perdona nada por ser mujeres. Pero aún así, tenemos "amigos con derechos" y no nos importa que nos sigan señalando y poniéndonos la letra escarlata.

Y la verdad no es que las mujeres debamos ser como los hombres, y convertirnos en "hombreriegas", nosotras no podríamos ser así, en las mujeres la conquista es más sutil, la seducción es más letal y el sexo no es simplemente sexo...